Amic Laporta

La verdad es que dudaba en escribir o no este post de hoy. El primer pensamiento que rondaba esta mañana mi cabeza era sin duda que por la temática de este blog, escribir sobre el presidente del FC Barcelona, y más en los últimos tiempos, tendría poco que ver con el mundo del marketing, publicidad o gestión empresarial. Por lo que lo descarté, por ir en contra de la temática de este sitio y porque ¿qué futuro me augura el crear un blog de marketing cuando el tercer post es sobre el presidente de un club de fútbol, más famoso por su anhelos políticos y de aislamiento territorial que por la gestión del mejor equipo del mundo en la actualidad? No obstante, si algo nos enseña el marketing o el management es que ambos existen desde que el mundo es mundo y, además, se pueden aplicar a casi cualquier disciplina: desde una empresa de electrodomésticos hasta para conquistar a tu pareja. Por ello, sí he podido encontrar sentido a escribir sobre Joan Laporta. Independientemente de sus inquietudes vitales, las cuales me dan exactamente lo mismo, lo que sí habría que reflexionar es sobre lo que está haciendo con la marca FC Barcelona. Hoy me he levantado con varias noticias sobre su figura y sobre el club (en generar notoriedad, no cabe duda que es experto). Por lo visto hoy comienza una caravana del equipo por pueblos de la comunidad catalana, con mucho cuidado de no pisar terreno no catalán, para ensalzar entre "los suyos" las gestas que han encumbrado al club a conseguir el mayor logro de la histora del fútbol durante este año (véase noticia: http://bit.ly/75Ah2j). Esto que ha promovido el señor Laporta no es más que una continuación coherente de sus convicciones.

La pregunta que me surge ahora es ¿en qué medida afecta esto a la identidad, la imagen, en definitiva, a la marca FC Barcelona? Pues no deja de ser, en términos marketinianos, un retroceso en el camino hacia la imagen deseada (el quién soy, cómo me ven, cómo creo que me ven y el cómo quiero que me vean). Cierto es que los que somos culés, los títulos logrados nos satisfacen enormemente, pero ¿ha perdido valores la marca FC Barcelona respecto a otras épocas, cómo con cuando presidía Núñez?, ¿los aficionados han valorado positivamente o les ha sido indiferente cuando el Barça cedió el espacio publictario de su camiseta a UNICEF? y ¿habría ganado más enteros el Real Madrid (o el AC Milán) en términos de valor respecto al Barça si hubieran hecho los primeros una temporada igual de brillante?  Pueden ser preguntas muy discutibles, pero lo que sí está claro es que si no ha habido una pérdida de valor, desde luego se ha estancado. No es difícil rentabilizar en términos de imagen una institución cuando se consigue un palmarés igual en un sólo año, pero al Barça esto se le atraganta, disgustando a muchos socios no catalanes, y me imagino que a alguno catalán también, que pagan por sentirse más del Barça, siendo de Extremadura, Andalucía o Asturias. El cliente manda, te quiere hoy y te abandona mañana. En el fútbol, como en política, creemos que todo se hereda y no van a dejar de seguirnos. Es posible, pero ahora no lo vemos porque el Barça está en racha. Pero ¿y cuando no lo esté? ¿Estará monetizando bien su valor el Barça hoy para lograr manternerlo mañana, como lleva haciendo el Real Madrid desde hace años? Seguro que a nivel internacional sí, pero España es un mercado futbolístico que trasciende de la mera venta de camisetas. La notoriedad del Barça como marca a nivel mundial es indudable en temporadas como esta, pero a su imagen le queda mucho recorrido cuando se jubile Laporta; su valor percibido actual no está la altura de sus hazañas. Aunque a lo mejor me equivoco.